CAPITULO VII
EL ESTADO RACISTA
I. Teóricos del Estado Racista
1. Antecedentes
Algunos autores sostiene que la ideología racista se remonta hasta los más lejanos tiempos de la antiguedad, poniendo, por lo menos, como punto de arranque la conquista y colonización de los pueblos de la India realizada por los arios, que en lenguaje sáncrito significa "noble".
Los arios, de origen caucásico, procedían del norte y basados en sus tradiciones lo mismo que en la belleza y fortaleza de su raza implantaron en la tierra conquistada un régimen de castas que perduraría desde unos 1,200 a. C. más o menos, hasta principios del siglo XX de nuestra era.
Tambien apoyan su opinión en la conducta del pueblo judío a través de su azarosa historia en la que se aprecia la idea de que considerándose el "pueblo escogido del Dios único" para erigirse en "dueños y señores del mundo", siempre han rehusado mezclarse con otros pueblos o razas, manteniendo, además de la pureza de su sangre, sus tradiciones religiosas y civiles, a pesar de todas sus vicisitudes.
Pero la idea del Estado Racista y nacionalista adquiere en el mundo moderno y contemporáneo una clara orientación no sólo de supremacía racial sino también de una decisiva orientación política encaminada a la dominación imperialista de los llamados pueblos inferiores.
La teoria del Estado racista se fundamenta en la concepción de las diferencias biológicas y psíquicas de las diversas especias de la raza humana, lo cual da la base para la construcción de una comunidad "nacional" o sea, de un Estado Nacional, exclusivo y propio de la raza; formado o constituido sólo por elementos de la raza dominante.
En este sentido se dan históricamente clases de "tendencias ideológicas del Estado racista" claramente definidas en sus proyecciones históricas.
Estas dos concepciones ideológicas del racismo estatal las denominamos nosotros de la siguiente forma:
a) El Estado racista puro; y
EL ESTADO RACISTA
I. Teóricos del Estado Racista
1. Antecedentes
Algunos autores sostiene que la ideología racista se remonta hasta los más lejanos tiempos de la antiguedad, poniendo, por lo menos, como punto de arranque la conquista y colonización de los pueblos de la India realizada por los arios, que en lenguaje sáncrito significa "noble".
Los arios, de origen caucásico, procedían del norte y basados en sus tradiciones lo mismo que en la belleza y fortaleza de su raza implantaron en la tierra conquistada un régimen de castas que perduraría desde unos 1,200 a. C. más o menos, hasta principios del siglo XX de nuestra era.
Tambien apoyan su opinión en la conducta del pueblo judío a través de su azarosa historia en la que se aprecia la idea de que considerándose el "pueblo escogido del Dios único" para erigirse en "dueños y señores del mundo", siempre han rehusado mezclarse con otros pueblos o razas, manteniendo, además de la pureza de su sangre, sus tradiciones religiosas y civiles, a pesar de todas sus vicisitudes.
Pero la idea del Estado Racista y nacionalista adquiere en el mundo moderno y contemporáneo una clara orientación no sólo de supremacía racial sino también de una decisiva orientación política encaminada a la dominación imperialista de los llamados pueblos inferiores.
La teoria del Estado racista se fundamenta en la concepción de las diferencias biológicas y psíquicas de las diversas especias de la raza humana, lo cual da la base para la construcción de una comunidad "nacional" o sea, de un Estado Nacional, exclusivo y propio de la raza; formado o constituido sólo por elementos de la raza dominante.
En este sentido se dan históricamente clases de "tendencias ideológicas del Estado racista" claramente definidas en sus proyecciones históricas.
Estas dos concepciones ideológicas del racismo estatal las denominamos nosotros de la siguiente forma:
a) El Estado racista puro; y
b) El Estado racista mesiánico.
Ambos sustentan el principio de la supremacía racial y el propósito de la dominación de los demás pueblos de la tierra. El segundo, además sustenta la idea de esta predestinado por naturaleza y por Dios para cumplir el designio de la dominación mundial.
Ejemplo del Estado racista puro los tenemos en el régimen de casta de la India y en el régimen surafricano del "Apartheid"; y del Estado racista mesiánico en el Estado hebreo antiguo, en el Estado sionista moderno y en el Estado del Tercer Reich Hitleriano. Hablaremos, en síntesis del Estado del Apartheid y del Estado Nazi.
2. Spencer
Otros de los fundamentos de la teoría racista están considerados en las doctrinas de la biología cuyas consquistas en el siglo pasado dieron gran impulso al conocimiento científico del hombre en cuanto ser natural. Entre esas doctrinas es bastante divulgada la de la herencia que tiende a demostrar la imposibilidad de la evolución de la especie humana y la ineluctable ley de la desigualdad de los hombres, y, por ende, de la desigualdad social. Pero así mismo, utilizan la doctrina de Darwin sobre la lucha por la existencia para demostrar que en esta lucha predomina el más fuerte biológicamente, como el capaz para resistir y para imponer ante los otros, de modo que también, en esta forma quedan justificadas las guerras de conquista y de agresión en contra de los pueblos que están destinados a vivir ineluctablemente sometidos a los conquistadores. A esta aplicación de las doctrinas de Darwin se le da el nombre de "Darwinismo social".
Es también utilizada la teoría organicista del sociólogo filósofo inglés Herber Spencer, quien concebía a la humanidad "como un organismo viviente". En este sentido se hace hincapié en concebir el Estado como una especie de organismo gigante, al cual se le aplican todas las leyes propias de un organismo viviente; y todo para justificar una política exterior de agresión, conquista y colonización. Las doctrinas de Spencer han sido aceptadas y desarrolladas por el biólogo sueco Keller en una obra titulada "El Estado como vida".
3. Malthus y su influencia
Otra corriente utilizada por los racistas es la doctrina de Malthus quien expuso hace unos ciento cincuenta años que existe una ley biológica, natural, que consiste en que la población tiende a crecer o desarrollarse más rapidamente, en progresión geométrica, que la elaboración de alimentos, cuyo desarrollo es más lento, en progresión aritmética, de modo que las crisis sociales, la falta de alimentos para las masas trabajadoras, no obedece a una ley social sino a una ley natural y biológica, a la cual no puede controlar ningún régimen político social.
Malthus agregaba que debía de limitarse las uniones matrimoniales para limitar los nacimentos y que las epidemias y las guerras eran beneficiosas para la humanidad. Sobre las teorías de este autor, los racistas sostienen la necesidad de guerra de exterminio de la población inferior, de los pueblos atrasados. Así lo expone el escritor norteamericano William Vogot, en su libro "El Camino de la Esclavitud" en donde sostiene que existe lo que el llama "ley de la fertilidad consumida de la tierra", la cual exige que los excedentes de la población humana, vuelvan al seno de la tierra para devolverle a ella su perdida vitalidad o fertilidad. Para este fin recomienda el exterminio de las poblaciones de la Unión Soviética, la de China y la del Japón, y como consecuencia, la ocupación de los territorios por los imperialistas norteamericanos (Vogot proclama sin ambages el desencadenamiento de una guerra mundial en la que se empleen los medios de exterminio masivo y es indudable que este exterminio va encaminado a diezmar o a destruir completamente a los pueblos de las razas inferiores).
4. Gobinneau
El aristócrata francés conde José Arturo de Gobinneau (1816-1882), es uno de los primeros expositores de las teorías sobre el Estado nacionalista y racista, en el transcurso del siglo XIX.
Ya hemos visto las teorías filosóficas de Fichte y de Hegel sobre el Estado nacionalista, que fueron expuestas por ellos a fines del siglo XVIII y principios del siglo XIX, las cuales, juntamente con la teoría sobre "el espíritu del pueblo" que preconiza la Escuela Histórica del Derecho sentaron las bases ideológicas del Estado nacionalista y racista de la monarquía feudal prusiana.
El conde de Gobinneau es autor de varios libros y ensayos, destacándose en su producción la obra titulada "Experiencia sobre la desigualdad de las razas", en cuatro tomos, en la que trata de explicar que la marcha de toda la historia humana obedece a las peculiaridades de las razas y de los pueblos. Factor importante en esta distinción es el concepto de "pureza" de las razas y de "mezcla" de las razas, comprendiendo en su conjunto a estos dos conceptos bajo el nombre de "química de razas".
Para Gobinneau existió en los tiempos primitivos una raza humana única que él denomina "Adánica", desconocida hasta hoy por todos los estudiosos de la Antropología. Según nuestro entender el nombre lo ha tomado de Adán, el primer hombre existente en la tierra, según el Génesis (primer libro de la Biblia, escrito por Moisés) por lo que pensamos que este autor elaboró sobre esta base su famosa tesis. Esa supuesta raza humana única, sin divisiones como las que posteriormente surgieron era totalmente "pura". Según este autor, más tarde aparecieron las razas amarilla y negra con las que se formó un conjunto de tres razas humanas principales, cuya mezcla ha dado origen a las anteriores divisiones de la humanidad.
Gobinneau sostiene que la pureza de la raza influye de manera decisiva en las cualidades físicas y psíquicas de las razas y de los pueblos; cuanto más pura es la sangre de una raza ésta es más perfecta; cuando es pura, los miembros de una raza tienen un mismo modo de pensar y de actuar, sus costumbres y tradiciones son constantes, sus instituciones son inmutables.
Atribuye este autor a la "mezcla de razas" los cambios en la historia, las revoluciones, el desarrollo social. Dice que la democracia es un producto degenerado de esa mezcla y deplora su acrecentamiento indeclinable en la Europa de su tiempo. "La falta de homogeneidad de la sangre, escribe, crea discrepancias en las concepciones; a consecuencia de la mezcla de razas, se produce la degeneración, la confusión, el estancamiento morboso". "Se manifiesta, afirma, el espíritu de frivolidad, el mezquino carácter voluble".
Clasifica basado en su juicio personal, a unos pueblos como "puros" y otros como "impuros" o "mezclados". Señala a la raza blanca como la más pura, la cual se distingue entre todos, por su belleza, inteligencia, valor, sentido del honor y conciencia de los grandes valores ideales de la vida. Sostiene que el sitio más importante de la tierra es el lugar ocupado por los hombres blancos. Dice que los Esclavos constituyen los grupos humanos más seniles, más exhaustos, más degenerados; mientras que los "germanos", a pesar de que no son "arios puros", son en la actualidad los mejores representantes de la raza blanca superior.
5. Gumplowicz
El jurisconsulto y sociólogo polaco, natural de Cracovia, Ludwik Gumplowicz (1838-1909) , sustentaba ideas racistas en cuanto a la concepción del Estado, del derecho y de la historia. Su teoría trata de presentar los más importantes fenómenos de la vida social, (como el aparecimiento de las clases sociales, de la propiedad privada, del Estado, del derecho, etc.) como una consecuencia de la lucha entre tribus de diferentes razas, como resultado de la conquista de los pueblos más fuertes sobre los más débiles, o sea de la dominación de los racialmente superiores sobre los racialmente inferiores.
Siguiendo al alemán Rodolfo Von Ihering, sostiene que el Estado es una organización basada en la fuerza y que su papel, su más importante función, está encaminada a aplastar las pretensiones de las clases dominadas y a la dominación de las razas inferiores.
En su libro "La lucha de las razas" sostiene que el motor de la historia son las relaciones entre las razas, que dichas relaciones son las que dirigen y aceleran todo el progreso de la historia humana y forman el movimiento eterno de la evolución de la humanidad; que todas las contradicciones sociales son el resultado de las luchas entre tribus y razas antagónicas; que la lucha por la dominación social, es el factor más importante de la evolución social; que la violencia, la conquista, es el factor primario en el desarrollo de la historia; que el crecimiento de la población obliga a los pueblos a luchar por el ensanchamiento de las fronteras de sus respectivos estados; que el sometimiento de unos contribuye al establecimiento de los superiores y a la formación de determinadas clases sociales y del Estado.
En su obra "Teoría del Estado" dice que los vencedores forman la clase gobernante y que los vencidos la clase sojuzgada; que también el Estado surge como consecuencia de la violencia y de la conquista; y que la esencia del Estado consiste en ser "una organización de dominación surgida de modo natural y predestinada para la salvaguardia de un determinado orden legal".
Esta teoría del surgimiento del Estado y de las clases como resultado de la violencia y de la conquista, fue apoyada por el sociólogo, filósofo y jurista austriaco Carlos Kausiky, después de haber renegado del marxismo.
6. Nietszche
Federico Guillermo Nietszche (1845-1900), es otro de los autores partidarios de las teorías racistas que tanta divulgación han tenido en las últimas décadas del siglo pasado y en todo lo que va del presente. Nietszche es autor de muchas obras en donde da curso a sus ideas, siendo todas notables y de las cuales citaremos las siguientes: "Humano, demasiado humano", "Más allá del bien y del mal", "Así hablaba Zaratustra", "El origen de la moral", etc.
Nietszche cree en una raza de superhombres y en una de esclavos; considera que existe una aristrocracia de hombres selectos y que esa casta son los alemanes; que la casta de hombes superiores está destinada a mandar y tiene voluntad de poder. Ataca a la democracia y desdeña al pueblo a quien llama despectivamente populacho, horda, raza de esclavos.
La moral cristiana la denomina "moral de esclavos"... Dice que la ley superior de la vida es la desigualdad de los hombres; y con base en dicho concepto formula su teoría del "superhombre" ensalzando desde el punto de vista del "darwinismo social" al "animal de piel blanca" que sin duda alguna es una referencia directa al supuesto ario alemán de "raza pura". También considera a los japoneses como hombres de raza superior. Al igual que todos los racistas alaba la guerra considerándola como un medio de depuración de la humanidad.
7. Chamberlain
Houston Stewart Chamberlain, aristócrata inglés (1855-1927), ha sido también otro importante partidario de la doctrina racista y ferviente propagador de sus principios. Fue tanta la admiración que tuvo por el pueblo alemán que optó por esta nacionalidad y sus obras las escribió en idioma alemán. Entre otras puede citarse "Los Fundamentos del Siglo XIX" en la que habla de la superioridad racial de los "teutones" del "genio organizador y regenerador del pueblo teutón" y de la fuerza dominante del nacionalista alemán. Chamberlain se refiere a una pretendida "raza nórdica" y distingue al grupo que él denomina "nórdico teutón", rechazando el término "ario" por considerarlo aconvencional. La raza nórdica-teutónica ha regenerado, salvado y rejuvenecido a la civilización occidental y está llamada a crear un nuevo mundo con un nuevo orden social. Predica un desprecio aristocrático contra las razas inferiores que forman los pueblos atrasados. Entre los pueblos o razas que más ataca como inferiores es al pueblo judío y en general a todos los grupos humanos de origen semita.
II. El Estado del Apartheid
1. Orígenes de la Unión Sudafricana y del Apartheid
La palabra "Apartheid" es un término inglés generalizado en el lenguaje político, cuyo significado es apartar, separar... En la práctica constituye un régimen de excepción practicado en Rodhessia (ahora Zimbawe, libre de ese régimen) y en la UNION SUDAFRICANA formada por las provincias (anteriormente repúblicas) de El Cabo, Orange,Transvaal y Natal, en donde el poder político está concentrado y detentado desde hace decenas de años por minorías blancas que discriminan de una manera radical a los extranjeros y segregan sin consideración alguna a las grandes mayorías de las poblaciones de color de diferentes troncos étnicos (negros, chinos, indúes, árabes, etc. ).
La Unión Sudafricana es una República que forma parte de la comunidad británica y su proceso de formación constituye una de las etapas más dramáticas de la dominación inglesa en el continente negro. En el siglo XVII, en el año 1650 comenzaron a establecerce en las costas sureñas de lo que ahora es el territorio de El Cabo cientos de campesinos holandeses llamados "Bóers", quienes quedaron definitivamente instalados en diversos sectores en el año 1652. Fundaron allí prósperas colonias que en poco tiempo adquirieron fama por su laboriosidad y por el notable desarrollo de las explotaciones agrícolas y ganaderas, al punto que atrajeron la atención, la envidia y la avaricia de los británicos que en ese entonces iniciaron la formación de su vasto imperio colonial. En 1697 comenzaron los ingleses a hostilizar a los bóers pero estos se defendieron con tenacidad y efectividad, logrando consolidarse en las tierras adquiridas y fundaron repúblicas independientes que Inglaterra se vió obligada a reconocer.
Sin embargo, atraídos por la riqueza de los territorios, muchos extranjeros (entre ellos muchos ingleses), en el siglo XVIII se fueron estableciendo en la parte sur del continente y alquilaban sus servicios a las diversas explotaciones; pero no obstante su asentamiento en el lugar, siempre fueron considerados por los bóers como extranjeros y nunca obtuvieron ellos ni sus descendientes los derechos de ciudadanía ni derechos civiles ni políticos. Este es el origen del régimen político del "Apartheid".
Los ingleses organizados comenzaron de nuevo a presionar a los bóers obligándolos a internarse en el suelo africano. Así fue como éstos fundaron las repúblicas del Transvaal, Orange y Natal.
En 1815 el Congreso de Viena concedió a Inglaterra su potestad sobre el territorio de El Cabo.
En 1849 Gran Bretaña se anexó a Natal y parte de Zutulandia y luego invadió y se posesionó de los territorios de Orange y Transvaal. Los bóers, celosos de su independencia sostuvieron nuevamente una tenaz resitencia obligando otra vez a Inglaterra a que les reconociera su status republicano. En 1877 una misión británica capitaneada por un coronel se apoderó de Pretoria, capital de la república de Transvaal y declaró que Transvaal y Orange quedaban anexados al dominio de la Gran Bretaña; pero nuevamente, los bóers en una lucha de más o menos cuatro años hasta 1881 volvieron a quedar independientes. En 1899 vuelve Inglaterra a querer establecer su poderío en el Transvaal y Orange iniciándose así el período que es conocido por "Guerra anglo-bóers", el cual terminó con la dominación de éstos, estableciéndose en 1906 su anexión a la colonia de El Cabo y posteriormente, en 1910, la creación de la República denominada Unión Sudafricana, con una Constitución análoga a la de Canadá y formada por los territorios de El Cabo, Orange, Natal y Transvaal. Finalmente por el Estatuto de Westminter, sancionado en 1931, la Unión adquirió su pleno status de dominio de la comunidad Británica; pero ya desde 1920 había recibido de la Sociedad de las Naciones como protectorado los territorios de Africa Occidental que hasta el total desarrollo de la primera guerra mundial habían sido dominio colonial del Imperio Alemán.
Pues bien, en esos territorios de 1,300,000 kilómetros cuadrados, habitados por una población de más o menos 24,000,000 de personas en donde hay una minoría blanca de aproximadamente tres millones de personas, el poder político es ejercido unicamente por la minoría blanca en su mayoría ingleses y holandeses. Estos practican la política del "Apartheid", del racismo y del colonialismo.
2. Características del Apartheid
El "Apartheid" consiste en un régimen en el cual la población de color
carece de derechos de toda clase: civiles y políticos. Solo los blancos
tienen todas las ventajas y privilegios resultantes de la administración autónoma otorgada a estas colonias del dominio inglés.
He aquí las características esenciales del "Apartheid":
a) Es racista, o sea que discrimina las razas, creen en la superioridad racial de la raza blanca sobre las demás estructuras étnicas y en consecuencia, desprecia, persigue y explota a las razas inferiores (de color) a quienes no concede ninguna clase de derechos.
b) Consecuentemente con esta política discriminativa de las razas, en el régimen del "Apartheid" las razas de color no tienen derechos civiles en lo relativo a la propiedad y a lo contractual; lo mismo que no tienen ninguna clase de derechos políticos.
c) Precisamente, en lo que se refiere a derechos políticos, los individuos de color no tienen derecho a elegir a representantes en el Gobierno, pero si están obligados a elegir a representantes blancos.
El racismo y el "Apartheid" ha sido y es practicado aún en otras partes del mundo, aún en nuestra América y en nuestros días. En tiempos de Mussolini y de Hitler tuvieron una de sus formas más fieras de expresión.
Los ideólogos del racismo y del Apartheid, en diferentes países de la tierra, presentan al proceso histórico de la humanidad, como resultado de la lucha de razas, de la lucha entre pueblos, considerando la guerra entre naciones como el factor más importante en el desarrollo social, económico y político de la humanidad. Estos teóricos del racismo y el Apartheid proclaman la desigualdad psíquica de los hombres, poniendo a la raza blanca como la única capaz de lograr un desarrollo superior debido a una conformación biológica diferente de los demás individuos "de color". Esta es la base ideológica con que alegan la desigualdad social de los pueblos y el sometimiento colonial de las naciones.
En la conferencia mundial contra el racismo, el apartheid y el colonialismo, celebrada del 20 al 26 de agosto de 1978 en Ginebra, Suiza, por las Naciones Unidas se llegó a la siguiente conclusión: El racismo y el régimen del apartheid son teorías cientificamente falsas, moralmente inhumanas, sociológicamente injustas e históricamente caducas...
III. El Estado Nazi
1. Doctrina básica del Estado nazi
La doctrina del Estado racista puro del Tercer Reich alemán se encuentra profundamente detallada en la obra "Mein Kamp" (Mi Lucha) del político austro-alemán Adolfo Hitler, quien fue, precisamente jefe del Partido Nacional Socialista Alemán y jefe del Tercer Reich desde 1933 a 1945.
"Un decreto bien hecho del destino me hizo nacer en Braumau, sobre el Rhin. Esa pequeña ciudad se encuentra en la frontera de esos dos Estados alemanes cuya reunión nos parecía, a nosotros, obra de la joven generación, que era la obra que deberíamos realizar por todos los medios posibles. La Austria alemana debería volver a la gran madre patria alemana... LOS HOMBRES DE UNA MISMA SANGRE DEBEN PERTENECER A LA MISMO REICH. Por eso la pequeña ciudad fronteriza de Braumau, se me mostraba como el simbolo de UNA GRAN MISION"...
Así comienza la obra de Hitler, que escribió en la prisión de Landsberg del Lech, en Baviera, cuando cumplía una condena de cinco años por el fracasado golpe de Estado en Munich el 9 de noviembre de 1923.
Hitler cree que la misión de toda su vida estaba ya escrita o determinada en el lugar mismo donde nació: Y ESTA MISION era la de hacer triunfar contra todas las leyes falsas y artificiales UNA LEY NATURAL Y SAGRADA: La ley de la COMUNIDAD DE SANGRE.
Hitler se dice "elegido del Cielo para proclamar la voluntad racista del Creador".
Hitler arremete contra todos los altos valores conquistados por la civilización: "La nación -dice- es una invención de las clases capitalistas; la patria, instrumento de la burguesía para la explotación de la clase obrera; la autoridad destinada a producir un material humano de esclavos, y también de guardianes; la religión, medio de debilitar al pueblo para mejor explotarlo a continuación; la moral, principio de estúpida paciencia para uso de borregos"...
"En política -piensa Hitler- triunfa sólo el que es brutal e intolerante; la masa tiene horror a los débiles y a los tibios; la masa se somete a las fuertes, al hombre entero, fanático, que infunde miedo y terror".
"El terror en el trabajo, en la fábrica, en los lugares de reunión y con ocasión de los mítines tendrá pleno éxito mientras un terror igual no le obstruya el camino (...) Si a la socialdemocracia se opone una doctrina mejor fundada, ésta vencerá, aunque la lucha sea dura, a condicion, sin embargo, de que actue con la misma brutalidad".
Hitler cree que la socialdemocracia, que el marxismo, es una invención interesanda de los judíos y que la jefatura de tal movimento está en manos judías con propósitos inicuos... Por eso, además de predicar la constitución de un Estado racista alemán, proclama la destrucción del judícomo la destrucción del movimiento del proletariado mundial.
Todo el mal viene del marxismo, pensaba Hitler, doctrina de un judío, forjada para establecer el dominio de los judíos sobre todos los pueblos: con este designio, el marxismo rechaza el principio aristocrático, único, conforme a la naturaleza de la dominación de la raza más fuerte y de los fuertes; con ese designio nefasto oponía el mayor número, el peso inerte de la masa, al derecho eterno de la superioridad de los fuertes; con ese designio fatal negaba la personalidad humana, y, sobre todo, reafirmaba la importancia de la superioridad de los fuertes por la sangre, por la raza, por la supremacía étnica; con ese designio ocultaba al hombre la condición primera de su existencia y de su civilización. Marxismo y judaísmo: he aquí la doble amenaza que se cierne para acabar con la existencia del pueblo alemán.
Otro problema fundamental que acomete la teoría del Estado racista alemán de Hitler, es el del "Parlamentarismo", o sea, uno de los fundamentos del Estado moderno.
Hitler siente repulsión ante el funcionamiento del Reichstat en Viena: es un espectáculo lamentable y risible, gente en masa que se interpela hablando alemán unos y una lengua eslava o dialecto otros, es decir, mezcla de razas, o sea, nacionalidades distintas, por otra parte, se habla de "Democracia" parlamentaria, lo cual, en sí, es radicalmente pernicioso: tiene primacía la decisión de la mayoría sobre el concepto de la responsabilidad del líder, va contra el espíritu aristocrático de la naturaleza; la democracia prepara el terreno el triunfo del marxismo; es un absurdo pensar que el genio pudiese ser el fruto del sufragio universal. Todo lo extraordinario que se ha realizado desde que el mundo es mundo, es producto de acciones individuales.
2. Concepciones y políticas principales
El Estado Nacional Socialista del Tercer Reich alemán es una concepción del mundo que puede reducirse a dos conceptos fundamentales: nacionalista racista y cuestión social obrera sin lucha de clases.
En cuando a política interior, el Estado Nacional Socialista, se proponía:
a) La regeneración racial. Esto implica a la distinción tajante entre alemanes y no alemanes. El hombre de sangre alemana es el único que puede ostentar la ciudadanía alemana, el único que puede ejercer las funciones públicas del Estado; y los no alemanes son aquellos que tiene sangre distinta del teutón o germano, entre ellos judíos, los eslavos, etc. Ellos no son ciudadanos en Alemania y pueden ser sometidos a la expulsión eventual;
b) Protección de la madre y del niño alemán;
c) Obligatoriedad a la educación física y deportiva;
d) Educación orientada con sentido práctico y con la idea de inculcar el concepto de un Estado racista, nacionalista y dominador o conquistador;
e) Lucha contra el parlamentarismo, contra el judaísmo, el materialismo, contra la mentira política voluntaria en la prensa; sustitución de la prensa judía por una prensa genuinamente alemana;
f) Sustitución del derecho romano universal y materialista por un derecho común alemán;
g) Proclamación de la necesidad de una vigorosa centralización del Reich;
h) Libertad de todo culto religoso en el Estado, bajo las condiciones de suprimirlos en el caso de que ponga en peligro la existencia del Estado y de que no convenga su existencia por contravenir los sentimientos de decencia y de moralidad de la raza germánica.
En materia de derecho internacional, el Estado Nacional Socialista se pronuncia en este sentido:
a) Reunión en una sola patria de todos los alemanes regados por todo el mundo, en diferentes Estados, es decir, ostentando diversas nacionalidades (Austria, Polonia, Hungría, etc.). Así se forjaría la Gran Alemania, sobre la base del derecho de los pueblos a disponer de sí mismos;
b) Igualdad de derechos para la nación alemana en relación con las demás naciones;
c) Supresión del Tratado de Versalles;
d) Restitución de las colonias alemanas a la nación alemana para darle cabida a los excedentes de población por la vía de la colonización (Lorena en Francia, los Sudetes en Checoslovaquia y Africa Sudoccidental).
En el plano social, afirma el Estado Nacional Socialista ser socialista y en lo económico, ser anticapitalista y se propone los siguientes objetivos:
a) Creación y protección de una pujante clase media sana, en oposición al marxismo que plantea la abolición de las clases como una ley del determinismo histórico;
b) Aniquilamiento o destrucción de las grandes fábricas y empresas y medidas de protección para las empresas pequeñas y los artesanos;
c) Reforma agraria que comprende la apropiación gratuita del suelo en interés general y la prohibición de toda especulación inmobiliaria;
d) Supresión de todas las rentas adquiridas sin trabajo, la abolición de la esclavitud de los tantos por cientos y de todos los intereses y la estatización de los trust.
De acuerdo a Feder, economista oficial del Tercer Reich, el Estado Nacional Socialista distinguía a tres clases de capital: el capital financiero prestamista; el capital acaparador judío; y el capital bienhechor y creador, puramente alemán o ario.
Ambos sustentan el principio de la supremacía racial y el propósito de la dominación de los demás pueblos de la tierra. El segundo, además sustenta la idea de esta predestinado por naturaleza y por Dios para cumplir el designio de la dominación mundial.
Ejemplo del Estado racista puro los tenemos en el régimen de casta de la India y en el régimen surafricano del "Apartheid"; y del Estado racista mesiánico en el Estado hebreo antiguo, en el Estado sionista moderno y en el Estado del Tercer Reich Hitleriano. Hablaremos, en síntesis del Estado del Apartheid y del Estado Nazi.
2. Spencer
Otros de los fundamentos de la teoría racista están considerados en las doctrinas de la biología cuyas consquistas en el siglo pasado dieron gran impulso al conocimiento científico del hombre en cuanto ser natural. Entre esas doctrinas es bastante divulgada la de la herencia que tiende a demostrar la imposibilidad de la evolución de la especie humana y la ineluctable ley de la desigualdad de los hombres, y, por ende, de la desigualdad social. Pero así mismo, utilizan la doctrina de Darwin sobre la lucha por la existencia para demostrar que en esta lucha predomina el más fuerte biológicamente, como el capaz para resistir y para imponer ante los otros, de modo que también, en esta forma quedan justificadas las guerras de conquista y de agresión en contra de los pueblos que están destinados a vivir ineluctablemente sometidos a los conquistadores. A esta aplicación de las doctrinas de Darwin se le da el nombre de "Darwinismo social".
Es también utilizada la teoría organicista del sociólogo filósofo inglés Herber Spencer, quien concebía a la humanidad "como un organismo viviente". En este sentido se hace hincapié en concebir el Estado como una especie de organismo gigante, al cual se le aplican todas las leyes propias de un organismo viviente; y todo para justificar una política exterior de agresión, conquista y colonización. Las doctrinas de Spencer han sido aceptadas y desarrolladas por el biólogo sueco Keller en una obra titulada "El Estado como vida".
3. Malthus y su influencia
Otra corriente utilizada por los racistas es la doctrina de Malthus quien expuso hace unos ciento cincuenta años que existe una ley biológica, natural, que consiste en que la población tiende a crecer o desarrollarse más rapidamente, en progresión geométrica, que la elaboración de alimentos, cuyo desarrollo es más lento, en progresión aritmética, de modo que las crisis sociales, la falta de alimentos para las masas trabajadoras, no obedece a una ley social sino a una ley natural y biológica, a la cual no puede controlar ningún régimen político social.
Malthus agregaba que debía de limitarse las uniones matrimoniales para limitar los nacimentos y que las epidemias y las guerras eran beneficiosas para la humanidad. Sobre las teorías de este autor, los racistas sostienen la necesidad de guerra de exterminio de la población inferior, de los pueblos atrasados. Así lo expone el escritor norteamericano William Vogot, en su libro "El Camino de la Esclavitud" en donde sostiene que existe lo que el llama "ley de la fertilidad consumida de la tierra", la cual exige que los excedentes de la población humana, vuelvan al seno de la tierra para devolverle a ella su perdida vitalidad o fertilidad. Para este fin recomienda el exterminio de las poblaciones de la Unión Soviética, la de China y la del Japón, y como consecuencia, la ocupación de los territorios por los imperialistas norteamericanos (Vogot proclama sin ambages el desencadenamiento de una guerra mundial en la que se empleen los medios de exterminio masivo y es indudable que este exterminio va encaminado a diezmar o a destruir completamente a los pueblos de las razas inferiores).
4. Gobinneau
El aristócrata francés conde José Arturo de Gobinneau (1816-1882), es uno de los primeros expositores de las teorías sobre el Estado nacionalista y racista, en el transcurso del siglo XIX.
Ya hemos visto las teorías filosóficas de Fichte y de Hegel sobre el Estado nacionalista, que fueron expuestas por ellos a fines del siglo XVIII y principios del siglo XIX, las cuales, juntamente con la teoría sobre "el espíritu del pueblo" que preconiza la Escuela Histórica del Derecho sentaron las bases ideológicas del Estado nacionalista y racista de la monarquía feudal prusiana.
El conde de Gobinneau es autor de varios libros y ensayos, destacándose en su producción la obra titulada "Experiencia sobre la desigualdad de las razas", en cuatro tomos, en la que trata de explicar que la marcha de toda la historia humana obedece a las peculiaridades de las razas y de los pueblos. Factor importante en esta distinción es el concepto de "pureza" de las razas y de "mezcla" de las razas, comprendiendo en su conjunto a estos dos conceptos bajo el nombre de "química de razas".
Para Gobinneau existió en los tiempos primitivos una raza humana única que él denomina "Adánica", desconocida hasta hoy por todos los estudiosos de la Antropología. Según nuestro entender el nombre lo ha tomado de Adán, el primer hombre existente en la tierra, según el Génesis (primer libro de la Biblia, escrito por Moisés) por lo que pensamos que este autor elaboró sobre esta base su famosa tesis. Esa supuesta raza humana única, sin divisiones como las que posteriormente surgieron era totalmente "pura". Según este autor, más tarde aparecieron las razas amarilla y negra con las que se formó un conjunto de tres razas humanas principales, cuya mezcla ha dado origen a las anteriores divisiones de la humanidad.
Gobinneau sostiene que la pureza de la raza influye de manera decisiva en las cualidades físicas y psíquicas de las razas y de los pueblos; cuanto más pura es la sangre de una raza ésta es más perfecta; cuando es pura, los miembros de una raza tienen un mismo modo de pensar y de actuar, sus costumbres y tradiciones son constantes, sus instituciones son inmutables.
Atribuye este autor a la "mezcla de razas" los cambios en la historia, las revoluciones, el desarrollo social. Dice que la democracia es un producto degenerado de esa mezcla y deplora su acrecentamiento indeclinable en la Europa de su tiempo. "La falta de homogeneidad de la sangre, escribe, crea discrepancias en las concepciones; a consecuencia de la mezcla de razas, se produce la degeneración, la confusión, el estancamiento morboso". "Se manifiesta, afirma, el espíritu de frivolidad, el mezquino carácter voluble".
Clasifica basado en su juicio personal, a unos pueblos como "puros" y otros como "impuros" o "mezclados". Señala a la raza blanca como la más pura, la cual se distingue entre todos, por su belleza, inteligencia, valor, sentido del honor y conciencia de los grandes valores ideales de la vida. Sostiene que el sitio más importante de la tierra es el lugar ocupado por los hombres blancos. Dice que los Esclavos constituyen los grupos humanos más seniles, más exhaustos, más degenerados; mientras que los "germanos", a pesar de que no son "arios puros", son en la actualidad los mejores representantes de la raza blanca superior.
5. Gumplowicz
El jurisconsulto y sociólogo polaco, natural de Cracovia, Ludwik Gumplowicz (1838-1909) , sustentaba ideas racistas en cuanto a la concepción del Estado, del derecho y de la historia. Su teoría trata de presentar los más importantes fenómenos de la vida social, (como el aparecimiento de las clases sociales, de la propiedad privada, del Estado, del derecho, etc.) como una consecuencia de la lucha entre tribus de diferentes razas, como resultado de la conquista de los pueblos más fuertes sobre los más débiles, o sea de la dominación de los racialmente superiores sobre los racialmente inferiores.
Siguiendo al alemán Rodolfo Von Ihering, sostiene que el Estado es una organización basada en la fuerza y que su papel, su más importante función, está encaminada a aplastar las pretensiones de las clases dominadas y a la dominación de las razas inferiores.
En su libro "La lucha de las razas" sostiene que el motor de la historia son las relaciones entre las razas, que dichas relaciones son las que dirigen y aceleran todo el progreso de la historia humana y forman el movimiento eterno de la evolución de la humanidad; que todas las contradicciones sociales son el resultado de las luchas entre tribus y razas antagónicas; que la lucha por la dominación social, es el factor más importante de la evolución social; que la violencia, la conquista, es el factor primario en el desarrollo de la historia; que el crecimiento de la población obliga a los pueblos a luchar por el ensanchamiento de las fronteras de sus respectivos estados; que el sometimiento de unos contribuye al establecimiento de los superiores y a la formación de determinadas clases sociales y del Estado.
En su obra "Teoría del Estado" dice que los vencedores forman la clase gobernante y que los vencidos la clase sojuzgada; que también el Estado surge como consecuencia de la violencia y de la conquista; y que la esencia del Estado consiste en ser "una organización de dominación surgida de modo natural y predestinada para la salvaguardia de un determinado orden legal".
Esta teoría del surgimiento del Estado y de las clases como resultado de la violencia y de la conquista, fue apoyada por el sociólogo, filósofo y jurista austriaco Carlos Kausiky, después de haber renegado del marxismo.
6. Nietszche
Federico Guillermo Nietszche (1845-1900), es otro de los autores partidarios de las teorías racistas que tanta divulgación han tenido en las últimas décadas del siglo pasado y en todo lo que va del presente. Nietszche es autor de muchas obras en donde da curso a sus ideas, siendo todas notables y de las cuales citaremos las siguientes: "Humano, demasiado humano", "Más allá del bien y del mal", "Así hablaba Zaratustra", "El origen de la moral", etc.
Nietszche cree en una raza de superhombres y en una de esclavos; considera que existe una aristrocracia de hombres selectos y que esa casta son los alemanes; que la casta de hombes superiores está destinada a mandar y tiene voluntad de poder. Ataca a la democracia y desdeña al pueblo a quien llama despectivamente populacho, horda, raza de esclavos.
La moral cristiana la denomina "moral de esclavos"... Dice que la ley superior de la vida es la desigualdad de los hombres; y con base en dicho concepto formula su teoría del "superhombre" ensalzando desde el punto de vista del "darwinismo social" al "animal de piel blanca" que sin duda alguna es una referencia directa al supuesto ario alemán de "raza pura". También considera a los japoneses como hombres de raza superior. Al igual que todos los racistas alaba la guerra considerándola como un medio de depuración de la humanidad.
7. Chamberlain
Houston Stewart Chamberlain, aristócrata inglés (1855-1927), ha sido también otro importante partidario de la doctrina racista y ferviente propagador de sus principios. Fue tanta la admiración que tuvo por el pueblo alemán que optó por esta nacionalidad y sus obras las escribió en idioma alemán. Entre otras puede citarse "Los Fundamentos del Siglo XIX" en la que habla de la superioridad racial de los "teutones" del "genio organizador y regenerador del pueblo teutón" y de la fuerza dominante del nacionalista alemán. Chamberlain se refiere a una pretendida "raza nórdica" y distingue al grupo que él denomina "nórdico teutón", rechazando el término "ario" por considerarlo aconvencional. La raza nórdica-teutónica ha regenerado, salvado y rejuvenecido a la civilización occidental y está llamada a crear un nuevo mundo con un nuevo orden social. Predica un desprecio aristocrático contra las razas inferiores que forman los pueblos atrasados. Entre los pueblos o razas que más ataca como inferiores es al pueblo judío y en general a todos los grupos humanos de origen semita.
II. El Estado del Apartheid
1. Orígenes de la Unión Sudafricana y del Apartheid
La palabra "Apartheid" es un término inglés generalizado en el lenguaje político, cuyo significado es apartar, separar... En la práctica constituye un régimen de excepción practicado en Rodhessia (ahora Zimbawe, libre de ese régimen) y en la UNION SUDAFRICANA formada por las provincias (anteriormente repúblicas) de El Cabo, Orange,Transvaal y Natal, en donde el poder político está concentrado y detentado desde hace decenas de años por minorías blancas que discriminan de una manera radical a los extranjeros y segregan sin consideración alguna a las grandes mayorías de las poblaciones de color de diferentes troncos étnicos (negros, chinos, indúes, árabes, etc. ).
La Unión Sudafricana es una República que forma parte de la comunidad británica y su proceso de formación constituye una de las etapas más dramáticas de la dominación inglesa en el continente negro. En el siglo XVII, en el año 1650 comenzaron a establecerce en las costas sureñas de lo que ahora es el territorio de El Cabo cientos de campesinos holandeses llamados "Bóers", quienes quedaron definitivamente instalados en diversos sectores en el año 1652. Fundaron allí prósperas colonias que en poco tiempo adquirieron fama por su laboriosidad y por el notable desarrollo de las explotaciones agrícolas y ganaderas, al punto que atrajeron la atención, la envidia y la avaricia de los británicos que en ese entonces iniciaron la formación de su vasto imperio colonial. En 1697 comenzaron los ingleses a hostilizar a los bóers pero estos se defendieron con tenacidad y efectividad, logrando consolidarse en las tierras adquiridas y fundaron repúblicas independientes que Inglaterra se vió obligada a reconocer.
Sin embargo, atraídos por la riqueza de los territorios, muchos extranjeros (entre ellos muchos ingleses), en el siglo XVIII se fueron estableciendo en la parte sur del continente y alquilaban sus servicios a las diversas explotaciones; pero no obstante su asentamiento en el lugar, siempre fueron considerados por los bóers como extranjeros y nunca obtuvieron ellos ni sus descendientes los derechos de ciudadanía ni derechos civiles ni políticos. Este es el origen del régimen político del "Apartheid".
Los ingleses organizados comenzaron de nuevo a presionar a los bóers obligándolos a internarse en el suelo africano. Así fue como éstos fundaron las repúblicas del Transvaal, Orange y Natal.
En 1815 el Congreso de Viena concedió a Inglaterra su potestad sobre el territorio de El Cabo.
En 1849 Gran Bretaña se anexó a Natal y parte de Zutulandia y luego invadió y se posesionó de los territorios de Orange y Transvaal. Los bóers, celosos de su independencia sostuvieron nuevamente una tenaz resitencia obligando otra vez a Inglaterra a que les reconociera su status republicano. En 1877 una misión británica capitaneada por un coronel se apoderó de Pretoria, capital de la república de Transvaal y declaró que Transvaal y Orange quedaban anexados al dominio de la Gran Bretaña; pero nuevamente, los bóers en una lucha de más o menos cuatro años hasta 1881 volvieron a quedar independientes. En 1899 vuelve Inglaterra a querer establecer su poderío en el Transvaal y Orange iniciándose así el período que es conocido por "Guerra anglo-bóers", el cual terminó con la dominación de éstos, estableciéndose en 1906 su anexión a la colonia de El Cabo y posteriormente, en 1910, la creación de la República denominada Unión Sudafricana, con una Constitución análoga a la de Canadá y formada por los territorios de El Cabo, Orange, Natal y Transvaal. Finalmente por el Estatuto de Westminter, sancionado en 1931, la Unión adquirió su pleno status de dominio de la comunidad Británica; pero ya desde 1920 había recibido de la Sociedad de las Naciones como protectorado los territorios de Africa Occidental que hasta el total desarrollo de la primera guerra mundial habían sido dominio colonial del Imperio Alemán.
Pues bien, en esos territorios de 1,300,000 kilómetros cuadrados, habitados por una población de más o menos 24,000,000 de personas en donde hay una minoría blanca de aproximadamente tres millones de personas, el poder político es ejercido unicamente por la minoría blanca en su mayoría ingleses y holandeses. Estos practican la política del "Apartheid", del racismo y del colonialismo.
2. Características del Apartheid
El "Apartheid" consiste en un régimen en el cual la población de color
carece de derechos de toda clase: civiles y políticos. Solo los blancos
tienen todas las ventajas y privilegios resultantes de la administración autónoma otorgada a estas colonias del dominio inglés.
He aquí las características esenciales del "Apartheid":
a) Es racista, o sea que discrimina las razas, creen en la superioridad racial de la raza blanca sobre las demás estructuras étnicas y en consecuencia, desprecia, persigue y explota a las razas inferiores (de color) a quienes no concede ninguna clase de derechos.
b) Consecuentemente con esta política discriminativa de las razas, en el régimen del "Apartheid" las razas de color no tienen derechos civiles en lo relativo a la propiedad y a lo contractual; lo mismo que no tienen ninguna clase de derechos políticos.
c) Precisamente, en lo que se refiere a derechos políticos, los individuos de color no tienen derecho a elegir a representantes en el Gobierno, pero si están obligados a elegir a representantes blancos.
El racismo y el "Apartheid" ha sido y es practicado aún en otras partes del mundo, aún en nuestra América y en nuestros días. En tiempos de Mussolini y de Hitler tuvieron una de sus formas más fieras de expresión.
Los ideólogos del racismo y del Apartheid, en diferentes países de la tierra, presentan al proceso histórico de la humanidad, como resultado de la lucha de razas, de la lucha entre pueblos, considerando la guerra entre naciones como el factor más importante en el desarrollo social, económico y político de la humanidad. Estos teóricos del racismo y el Apartheid proclaman la desigualdad psíquica de los hombres, poniendo a la raza blanca como la única capaz de lograr un desarrollo superior debido a una conformación biológica diferente de los demás individuos "de color". Esta es la base ideológica con que alegan la desigualdad social de los pueblos y el sometimiento colonial de las naciones.
En la conferencia mundial contra el racismo, el apartheid y el colonialismo, celebrada del 20 al 26 de agosto de 1978 en Ginebra, Suiza, por las Naciones Unidas se llegó a la siguiente conclusión: El racismo y el régimen del apartheid son teorías cientificamente falsas, moralmente inhumanas, sociológicamente injustas e históricamente caducas...
III. El Estado Nazi
1. Doctrina básica del Estado nazi
La doctrina del Estado racista puro del Tercer Reich alemán se encuentra profundamente detallada en la obra "Mein Kamp" (Mi Lucha) del político austro-alemán Adolfo Hitler, quien fue, precisamente jefe del Partido Nacional Socialista Alemán y jefe del Tercer Reich desde 1933 a 1945.
"Un decreto bien hecho del destino me hizo nacer en Braumau, sobre el Rhin. Esa pequeña ciudad se encuentra en la frontera de esos dos Estados alemanes cuya reunión nos parecía, a nosotros, obra de la joven generación, que era la obra que deberíamos realizar por todos los medios posibles. La Austria alemana debería volver a la gran madre patria alemana... LOS HOMBRES DE UNA MISMA SANGRE DEBEN PERTENECER A LA MISMO REICH. Por eso la pequeña ciudad fronteriza de Braumau, se me mostraba como el simbolo de UNA GRAN MISION"...
Así comienza la obra de Hitler, que escribió en la prisión de Landsberg del Lech, en Baviera, cuando cumplía una condena de cinco años por el fracasado golpe de Estado en Munich el 9 de noviembre de 1923.
Hitler cree que la misión de toda su vida estaba ya escrita o determinada en el lugar mismo donde nació: Y ESTA MISION era la de hacer triunfar contra todas las leyes falsas y artificiales UNA LEY NATURAL Y SAGRADA: La ley de la COMUNIDAD DE SANGRE.
Hitler se dice "elegido del Cielo para proclamar la voluntad racista del Creador".
Hitler arremete contra todos los altos valores conquistados por la civilización: "La nación -dice- es una invención de las clases capitalistas; la patria, instrumento de la burguesía para la explotación de la clase obrera; la autoridad destinada a producir un material humano de esclavos, y también de guardianes; la religión, medio de debilitar al pueblo para mejor explotarlo a continuación; la moral, principio de estúpida paciencia para uso de borregos"...
"En política -piensa Hitler- triunfa sólo el que es brutal e intolerante; la masa tiene horror a los débiles y a los tibios; la masa se somete a las fuertes, al hombre entero, fanático, que infunde miedo y terror".
"El terror en el trabajo, en la fábrica, en los lugares de reunión y con ocasión de los mítines tendrá pleno éxito mientras un terror igual no le obstruya el camino (...) Si a la socialdemocracia se opone una doctrina mejor fundada, ésta vencerá, aunque la lucha sea dura, a condicion, sin embargo, de que actue con la misma brutalidad".
Hitler cree que la socialdemocracia, que el marxismo, es una invención interesanda de los judíos y que la jefatura de tal movimento está en manos judías con propósitos inicuos... Por eso, además de predicar la constitución de un Estado racista alemán, proclama la destrucción del judícomo la destrucción del movimiento del proletariado mundial.
Todo el mal viene del marxismo, pensaba Hitler, doctrina de un judío, forjada para establecer el dominio de los judíos sobre todos los pueblos: con este designio, el marxismo rechaza el principio aristocrático, único, conforme a la naturaleza de la dominación de la raza más fuerte y de los fuertes; con ese designio nefasto oponía el mayor número, el peso inerte de la masa, al derecho eterno de la superioridad de los fuertes; con ese designio fatal negaba la personalidad humana, y, sobre todo, reafirmaba la importancia de la superioridad de los fuertes por la sangre, por la raza, por la supremacía étnica; con ese designio ocultaba al hombre la condición primera de su existencia y de su civilización. Marxismo y judaísmo: he aquí la doble amenaza que se cierne para acabar con la existencia del pueblo alemán.
Otro problema fundamental que acomete la teoría del Estado racista alemán de Hitler, es el del "Parlamentarismo", o sea, uno de los fundamentos del Estado moderno.
Hitler siente repulsión ante el funcionamiento del Reichstat en Viena: es un espectáculo lamentable y risible, gente en masa que se interpela hablando alemán unos y una lengua eslava o dialecto otros, es decir, mezcla de razas, o sea, nacionalidades distintas, por otra parte, se habla de "Democracia" parlamentaria, lo cual, en sí, es radicalmente pernicioso: tiene primacía la decisión de la mayoría sobre el concepto de la responsabilidad del líder, va contra el espíritu aristocrático de la naturaleza; la democracia prepara el terreno el triunfo del marxismo; es un absurdo pensar que el genio pudiese ser el fruto del sufragio universal. Todo lo extraordinario que se ha realizado desde que el mundo es mundo, es producto de acciones individuales.
2. Concepciones y políticas principales
El Estado Nacional Socialista del Tercer Reich alemán es una concepción del mundo que puede reducirse a dos conceptos fundamentales: nacionalista racista y cuestión social obrera sin lucha de clases.
En cuando a política interior, el Estado Nacional Socialista, se proponía:
a) La regeneración racial. Esto implica a la distinción tajante entre alemanes y no alemanes. El hombre de sangre alemana es el único que puede ostentar la ciudadanía alemana, el único que puede ejercer las funciones públicas del Estado; y los no alemanes son aquellos que tiene sangre distinta del teutón o germano, entre ellos judíos, los eslavos, etc. Ellos no son ciudadanos en Alemania y pueden ser sometidos a la expulsión eventual;
b) Protección de la madre y del niño alemán;
c) Obligatoriedad a la educación física y deportiva;
d) Educación orientada con sentido práctico y con la idea de inculcar el concepto de un Estado racista, nacionalista y dominador o conquistador;
e) Lucha contra el parlamentarismo, contra el judaísmo, el materialismo, contra la mentira política voluntaria en la prensa; sustitución de la prensa judía por una prensa genuinamente alemana;
f) Sustitución del derecho romano universal y materialista por un derecho común alemán;
g) Proclamación de la necesidad de una vigorosa centralización del Reich;
h) Libertad de todo culto religoso en el Estado, bajo las condiciones de suprimirlos en el caso de que ponga en peligro la existencia del Estado y de que no convenga su existencia por contravenir los sentimientos de decencia y de moralidad de la raza germánica.
En materia de derecho internacional, el Estado Nacional Socialista se pronuncia en este sentido:
a) Reunión en una sola patria de todos los alemanes regados por todo el mundo, en diferentes Estados, es decir, ostentando diversas nacionalidades (Austria, Polonia, Hungría, etc.). Así se forjaría la Gran Alemania, sobre la base del derecho de los pueblos a disponer de sí mismos;
b) Igualdad de derechos para la nación alemana en relación con las demás naciones;
c) Supresión del Tratado de Versalles;
d) Restitución de las colonias alemanas a la nación alemana para darle cabida a los excedentes de población por la vía de la colonización (Lorena en Francia, los Sudetes en Checoslovaquia y Africa Sudoccidental).
En el plano social, afirma el Estado Nacional Socialista ser socialista y en lo económico, ser anticapitalista y se propone los siguientes objetivos:
a) Creación y protección de una pujante clase media sana, en oposición al marxismo que plantea la abolición de las clases como una ley del determinismo histórico;
b) Aniquilamiento o destrucción de las grandes fábricas y empresas y medidas de protección para las empresas pequeñas y los artesanos;
c) Reforma agraria que comprende la apropiación gratuita del suelo en interés general y la prohibición de toda especulación inmobiliaria;
d) Supresión de todas las rentas adquiridas sin trabajo, la abolición de la esclavitud de los tantos por cientos y de todos los intereses y la estatización de los trust.
De acuerdo a Feder, economista oficial del Tercer Reich, el Estado Nacional Socialista distinguía a tres clases de capital: el capital financiero prestamista; el capital acaparador judío; y el capital bienhechor y creador, puramente alemán o ario.
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